martes, 30 de septiembre de 2014

La leche y sus derivados

LÁCTEOS, ¿BUENOS O MALOS? Sep 29 2014 Por Verónica Guzmán Visitas 20,433 3 Enviar e-mail 3 PUBLICIDAD Más deCUERPO SANO PREPARA LECHE DE COCO EN TU CASA SEP 30 2014 CALCIO, HIERRO Y AMINOÁCIDOS A TRAVÉS DE LA QUINOA SEP 28 2014 APRENDE A PREPARAR PASTELITOS DE CHÍA SEP 27 2014 PUBLICIDAD Seguramente has escuchado a gente que afirma que consumir lácteos es dañino para la salud, hoy te damos los pros y los contras de incluirlos en tu dieta para que tú mismo tomes una decisión informada La leche animal y sus derivados se encuentran entre los alimentos de mayor consumo del mundo debido a sus propiedades nutritivas, su riqueza en proteína, vitaminas y minerales, su buen sabor y los beneficios que aporta el calcio para mantener los huesos sanos. Pero, ¿es realmente saludable ingerirlos? Los lácteos son un grupo de alimentos compuestos por agua, proteínas, grasas, hidratos de carbono, vitaminas, minerales y sales; ejemplos de aquellos que se consideran nutritivos son la leche, el yogurt, el queso y el jocoque. Por su parte, hay algunos que sólo aportan grasas y azúcares como la crema, mantequilla y los helados. El más popular La leche es uno de los alimentos de origen animal más consumido y valorado en nuestra sociedad; el ser humano es el único en la naturaleza que por diversas razones sigue ingiriéndola después de la infancia. Desde que nacemos tenemos contacto con los lácteos ya que nos alimentamos de leche materna, alimento ideal para el comienzo de una vida saludable. Durante los primeros meses de vida, la lactancia materna proporciona la nutrición adecuada para promover el crecimiento y desarrollo, brinda protección contra las infecciones y su duración ha sido positivamente relacionada con el contenido y la densidad mineral ósea en niños y adolescentes. A pesar de lo anterior, los beneficios de la leche han sido cuestionados por los médicos y nutriólogos, quienes coinciden en que aunque es uno de los alimentos más nutritivos y completos ya que contiene proteínas, carbohidratos, fósforo, potasio, calcio y vitaminas A,C y B12 su consumo puede ser dañino para los adultos, quienes después de los 25 años ya no absorben igual los nutrientes. La nutrióloga, Carolina González, recomienda que si los adultos optan por consumir leche deben revisar la información nutricional y poner en balance las necesidades que tenemos y sólo consumir un vaso al día; en el caso de los niños darles la leche que contiene menos azúcar y hacerlo por la mañana ya que durante el día toda esa energía que le aporta la va a gastar, lo contrario de las noches en las que ya no hacen ninguna actividad para quemarla. Debemos evitar las leches de sabores porque el 70% de su contenido tiene caseína (proteína) y sumado a todo lo que comemos en el día, sobrepasa los niveles que debemos tener. Si consumes mucho queso trata de que sea lo más fresco posible ya que entre más añejos y amarillos sean son más grasosos; en el caso de los yogurts hay que tener mucho cuidado porque la mayoría son de sabores, así que contienen mucha grasa y azúcar, por lo que no se recomienda su consumo o, en dado caso, tomar los naturales. Y aunque los lácteos como la leche, queso y yogurt son los que más beneficios contienen (ente 180 y 350 miligramos de calcio por porción) existen otros alimentos que pueden aportar los mismos beneficios como el brócoli, almendras, sardinas, pescado y charales. Así que el hecho de eliminar la leche y lácteos de una dieta no hace que te descalcifiques. Acerca de la intolerancia Aunque hay quienes pueden tomar leche toda su vida sin presentar reacciones adversas, hoy en día existen muchísimas personas que no la pueden consumir y que presentan un cuadro comúnmente conocido con “intolerancia a la lactosa”. Lo anterior se debe a que el principal hidrato de la leche es la lactosa la cual para poder ser dirigida por el organismo necesita de una proteína (enzima) llamada lactasa. En ocasiones, dicha enzima falta total o parcialmente y es cuando una persona presenta esta intolerancia.